Antofagasta: plan piloto optimizará tiempos de respuesta en ambulancias SAMU

 Antofagasta: plan piloto optimizará tiempos de respuesta en ambulancias SAMU

Un equipo de expertos de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Geológicas de la Universidad Católica del Norte (UCN), creó un innovador modelo matemático basado en datos históricos, que permitirá ubicar las ambulancias en sitios estratégicos, y así concurrir a las emergencias en el menor tiempo posible.

La iniciativa es probada en Antofagasta desde el 1 de marzo, y forma parte de un plan piloto que comenzó en La Serena en enero. “Es un proyecto pionero en Chile, que ayudará a reducir el tiempo de respuesta del SAMU. En un futuro, el objetivo es expandir este plan a todo el territorio nacional. De esta manera, desde la academia contribuiremos -mediante ciencia aplicada- a brindar una atención de salud pública oportuna y de calidad, en el lugar y el momento adecuado, que es un anhelo de la ciudadanía”, señala Hernán Cáceres, decano de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Geológicas de la UCN y director del proyecto “Reducción en el tiempo de respuesta de las ambulancias SAMU en las regiones de Antofagasta y Coquimbo”.

Cáceres, agrega que “a través de modelos matemáticos basados en los datos históricos de las emergencias de cada ciudad y su georreferenciación, es posible determinar distintos puntos estratégicos para situar ambulancias y así acortar el tiempo de respuesta”.

La puesta en marcha de este piloto se produce justo en inicio de temporada escolar, una época ajetreada y compleja para los equipos de salud, dado el alto flujo vehicular que causa aumento en la congestión de distintas vías de la ciudad, afectando los tiempos de respuesta de las ambulancias del Servicio de Atención Médico de Urgencias (SAMU), las únicas preparadas para solucionar emergencias de alta complejidad.

Para la jefa del SAMU, Francesca Carú, esta iniciativa permitirá comprobar el tiempo de respuesta de las ambulancias en sectores más alejados. “Este plan piloto se implementará en algunos horarios y días de la semana, oportunidad en la que un móvil del SAMU se moverá desde la base hasta uno de los sectores con más demanda, lo que permitirá al equipo de la UCN hacer una medición y evaluar los tiempos de respuesta”, explicó.

El director (s) del Servicio de Salud de Antofagasta, Mario Rojas, valoró la iniciativa e indicó que “busca fortalecer el trabajo diario que desarrolla el personal del SAMU, el que debe superar distintos desafíos -congestión vehicular, vías en reparación, entre otros- para atender las emergencias de la comunidad. El que este proyecto piloto resulte, nos va permitir seguir avanzando en el perfeccionamiento de un servicio clave para nuestros vecinos, que se brinda en casos de emergencia cuando la vida de una persona está en peligro”.

Matemáticas que salvan vidas

En las zonas urbanas, el Modelo Nacional Sistema de Atención Médica de Urgencia SAMU, propone la llegada de una ambulancia SAMU en el 95% de las ocasiones antes de 8 minutos cuando se trate de una emergencia tiempo dependiente. Dentro de esta categoría se encuentran los paros cardiorrespiratorios, politraumatismos, síndrome coronario agudo, accidentes cerebrovasculares e insuficiencia respiratoria, entre otros.

“Hay emergencias cuya complejidad y gravedad hacen que cada segundo cuente a la hora de recibir atención médica especializada. Tener la posibilidad de llegar a atender más rápido estos incidentes puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte de un paciente. Hoy, nuestro enfoque en conjunto con el del Servicio de Salud, está puesto en buscar estrategias que permitan aumentar la cobertura de estas emergencias y poder ayudar a cumplir el objetivo establecido en la propuesta del Modelo Nacional del SAMU, que es llegar en el menor tiempo posible a atender estos incidentes”, agrega Andrea Fernández, subdirectora del proyecto.

Cómo ayudar

Además de la tecnología, la comunidad puede jugar un rol clave en ayudar a salvar vidas. Tanto conductores como peatones pueden colaborar activamente al ver una ambulancia del SAMU acudiendo, o trabajando en el sitio de una emergencia.

Lo primero es identificar una ambulancia que va a atender una urgencia: solo los vehículos del SAMU -conocidos por su típico color amarillo brillante- tienen el equipamiento necesario para atender estos incidentes. Por regla, deben tener las balizas encendidas, pero si tienen las sirenas activadas sí o sí se trata una emergencia.

  • Si presencia un accidente donde podría estar en riesgo la vida de una persona, llame inmediatamente al 131, el número nacional del SAMU, que derivará una ambulancia al sitio del suceso en caso de ser requerida.
  • Si se está conduciendo en el mismo sentido que una ambulancia, se debe hacer a un lado de la calzada, lo más cerca posible de la solera o del eje para facilitar su traslado.
  • Si se encuentra en un cruce y justo se aproxima un vehículo de emergencia, se le debe otorgar la pasada.
  • En caso de encontrarse cerca de una luz roja, se debe disminuir la velocidad (o detenerse si es necesario), priorizando la circulación del SAMU.
  • Facilite el trabajo del personal del SAMU y evite grabar el procedimiento para asegurar el respeto al paciente y los funcionarios.

“Es fundamental la cooperación de la comunidad a la hora de atender llamados de emergencia. Acciones tan sencillas como ceder la pasada cuando una ambulancia va con las sirenas y balizas encendidas puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte”, comenta Carú.

La iniciativa comenzó a implementarse este martes 1 de marzo y evaluará los tiempos de respuesta hasta el 24 del mismo mes.