Cerebro multitarea: ¿capacidad o trampa moderna?

Realizar varias cosas a la vez parece eficiente, pero puede estar afectando tu rendimiento y salud mental.
En la era digital, el multitasking es sinónimo de productividad. Responder correos mientras se atienden llamadas, se cocina o se revisan redes sociales parece normal. Sin embargo, diversos estudios de neurociencia indican que el cerebro humano no está diseñado para realizar múltiples tareas simultáneamente. Lo que en realidad hacemos es “cambiar de foco” constantemente, lo que agota más energía y aumenta los errores.
Según la Universidad de Stanford, quienes intentan hacer multitarea de forma habitual tienen menos capacidad de filtrar información irrelevante y menor retención de memoria a largo plazo. Además, esta práctica se asocia con mayor ansiedad y fatiga mental. La clave está en el enfoque profundo, también llamado “monotarea”, que permite ser más eficiente y creativo.
El “slow working” no significa hacer menos, sino hacer mejor. Priorizar tareas, establecer bloques de concentración sin interrupciones y respetar los descansos puede aumentar el rendimiento y la salud mental a largo plazo. Menos es, a veces, mucho más.